Los avances en nefrología han permitido mejorar la calidad de vida y prolongar la supervivencia de personas con enfermedad renal crónica avanzada (ERCA), si bien, los diversos tipos de tratamientos renal sustitutivos utilizados no están exentos de complicaciones que, en determinados momentos puede suponer incluso un deterioro de esa calidad de vida que haga replantear su retirada, decisión altamente difícil.

La formación y entrenamiento por parte de los futuros especialistas de la Psicología en esta área es fundamental para seguir avanzando en esa medicina del futuro de atención centrada en la persona y donde el trabajo de planificar de forma anticipada lo que el paciente desea según sus valores y preferencias debe formar parte del día a día de nuestros profesionales.

La formación y entrenamiento por parte de los futuros especialistas de la Psicología en esta área es fundamental para seguir avanzando en esa medicina del futuro de atención centrada en la persona y donde el trabajo de planificar de forma anticipada lo que el paciente desea según sus valores y preferencias debe formar parte del día a día de nuestros profesionales.

En la 8ª Sesión de Formación a Profesionales de la Psicología, tuvimos la suerte de contar con Dr. Juan Pablo Leiva Santos; Responsable Médico del Equipo de Soporte Hospitalario y Cuidados Paliativos Hospital de Manacor Mallorca, Islas Baleares y nuevo presidente de la SECPAL (Sociedad Española de Cuidados Paliativos) que abordo como clave;  el manejo del dolor y el control de síntomas, así como habilidades de comunicación y otros aspectos psicológicos y éticos en el paciente renal, concluyendo que en la atención al paciente renal crónico, desde la medicina paliativa puede suponer un provechoso impacto en la calidad de vida del paciente y su familia, además de optimizar el complejo tratamiento nefrológico del paciente.

Una muestra de todo este trabajo de análisis e investigación la encontramos en la siguiente guía de Cuidados Paliativos En Enfermedad Renal Crónica Avanzada

 


Desde la medicina paliativa puede suponer un provechoso impacto en la calidad de vida del paciente y su familia, además de optimizar el complejo tratamiento nefrológico del paciente