Prevención, diagnóstico precoz y tratamiento (trasplante) son los tres ejes prioritarios para la Federación Nacional de Asociaciones para la Lucha Contra las Enfermedades del Riñón (Alcer). Daniel Gallego, comenta sus retos.

Pregunta. ¿Qué prioridades lanzáis al nuevo Ejecutivo?

R. Queremos que la equidad esté garantizada. Ese concepto utópico que todo el mundo pide, y que al final tenemos la salud de nuestro código postal. Queremos que las nuevas opciones terapéuticas estén financiadas por el Sistema Nacional de Salud. Además, pedimos que nos consulten y que nos tengan en cuenta, ya que los pacientes también podemos aportar mucho valor al sistema de salud y a los nuevos desafíos.

P. ¿Cuáles son los principales objetivos del próximo año?

R. Con la longevidad y la esperanza de vida actual, se plantean muchos retos en este sentido porque la enfermedad renal progresa con la edad. No nos vamos a quejar de vivir más, pero hay que tener en cuenta que desde los 30 años se pierden uno 0,8 mililitros de filtrado… y claro, cuando llegas con 70-80 años tienes un 60 por ciento de función renal. A todo esto se suma lógicamente los factores de hábitos nocivos como el tabaco o el alcohol, sumado a la hipertensión o la obesidad, diabetes… Todo afecta al riñón. Ante este escenario lo que se nos plantea es que tendremos más pacientes renales y crónicos con afectación renal. ¿Cómo el sistema podrá absorber toda esta cronicidad? Tendremos que estar preparados para fomentar más que nunca la prevención, ya que ninguna política de salud está completa sin ella. Tenemos un magnífico sistema para la enfermedad aguda pero para la cronicidad aún le cuesta mucho, por la fragmentación entre niveles asistenciales que existe. Estos retos harán que las asociaciones de pacientes y el sistema de salud tomen el protagonismo desde la prevención. El segundo objetivo es la detección precoz. Se estima que hay 850 millones de pacientes renales en el mundo, pero más de la mitad no lo saben. Además, si vamos a la prevención y a la detección precoz, tendremos que incrementar el trasplante. Lo ideal para nosotros es que no haya lista de espera para esperar un órgano, que no haya diálisis.

P. En el contexto de la Medicina de Precisión, ¿estáis los pacientes siendo ya protagonistas en el nuevo paradigma?

R. Nos queda muchísimo por hacer. Siempre dicen que el paciente está en el centro. Yo siempre digo que el paciente está en el centro de salud o de especialidades, pero no en el centro del sistema. Queremos tener voz, pero que se nos escuche de verdad; tener elección y tomar decisiones compartidas; y coproducción en las guías clínicas, documentos de consenso, etcétera. Aunque nos queda mucho, es cierto que se está empezando a tomar conciencia de la importancia de la participación de los pacientes en el SNS.

P. Sin embargo, ¿algunos países que ya nos llevan la delantera en este sentido?

R. Es verdad que países como Reino Unido nos lleva ventaja. Nosotros queremos estar en los Comités de Salud y en las estrategias de abordaje de la cronicidad, es decir, en cualquier sitio donde haya un profesional que también haya un paciente. De hecho, Castilla-La Mancha ha incorporado la figura ‘pacientes profesionales expertos por experiencia’, pacientes capacitados que pueden ser profesionales y expertos por esa experiencia que tienen de tantos años.

P. ¿Crees que hay comunidades más avanzadas que otras?

R. Sí. Como siempre hay comunidades como Cataluña que ya han incorporado pacientes al mismo nivel que los profesionales en los Comités de Salud. La Comunidad de Madrid también empieza a despuntar. Vemos que las 17 comunidades autónomas son al final 17 países independientes y cada una va a su ritmo.

 


Queremos que la equidad esté garantizada. Ese concepto utópico que todo el mundo pide, y que al final tenemos la salud de nuestro código postal. Queremos que las nuevas opciones terapéuticas estén financiadas por el Sistema Nacional de Salud.


 

Fuente: Gaceta Médica